El Juicio por Jurados: ¡tu posible salvación!
El juicio por jurados es una gran opción para los imputados en una causa penal que puedan acceder a él. Requiere grandes destrezas de litigación oral por parte del abogado penalista que tendrá en sus manos la defensa de la causa. Conocé más de este instituto que nació con nuestra Constitución Nacional y entendé por qué es una herramienta clave para democratizar el acceso a la justicia.
Respaldo Constitucional y Legal
El juicio por jurados está consagrado en:
- Artículos 24, 75 inciso 12 y 118 de la Constitución Nacional: Establecen la obligación de implementar el juicio por jurados en el país.
- Código Procesal Penal de la Provincia de Buenos Aires (CPPBA): desde el art. 1 lo menciona, al hablar de «juez natural», algo que no es casualidad. De esta estrecha relación se puede leer más en este artículo.
Aunque la Constitución Nacional lo previó desde 1853, su aplicación efectiva quedó en desuso por casi 160 años, hasta que la Provincia de Buenos Aires realizó el primer juicio por jurados en 2015.
El Primer Juicio por Jurados en la Provincia de Buenos Aires
En marzo de 2015, se llevó a cabo el primer juicio por jurados en la Provincia de Buenos Aires, marcando un hito en la historia judicial argentina. Este caso, que involucró un homicidio, destacó la participación activa de ciudadanos comunes en el veredicto, evidenciando el potencial de este sistema para reforzar la legitimidad y la imparcialidad en las decisiones judiciales.

¿Cómo Funciona el Juicio por Jurados?
Selección de Jurados
El jurado se compone de 12 ciudadanos seleccionados al azar de los padrones electorales y 6 suplentes. Los requisitos básicos incluyen:
- Ser mayor de 18 años.
- No tener antecedentes penales.
- No ejercer profesiones relacionadas con la justicia o la seguridad pública.
Durante la selección, tanto la defensa como la fiscalía pueden recusar a ciertos candidatos, según si le sirven o no a su teoría del caso.
Delitos y Decisiones
El juicio por jurados aplica a delitos graves, como:
- Homicidios.
- Delitos contra la integridad sexual.
- Secuestros extorsivos.
El jurado emite un veredicto de culpabilidad o no culpabilidad, que debe ser unánime o contar con una mayoría especial, dependiendo del caso. La imposición de la pena queda en manos del juez profesional.
Capacitación y Rol del Jurado
Antes del juicio, los jurados reciben una capacitación básica sobre sus funciones y responsabilidades. Durante el juicio, su rol es escuchar las pruebas y argumentos presentados por las partes y deliberar basándose únicamente en lo expuesto durante el proceso.
El rol del Abogado Penalista
Es fundamental contar con un abogado penalista que tenga conocimiento en este tipo de juicios para defender una causa. En estos debates se requiere conocimiento jurídico pero, también, grandes destrezas de litigación oral. Hay que saber exponer y explicar la prueba, estar atento al comento del examen del testigo, saber contra examinar, comunicarse con el jurado.

Beneficios del jurado en vez del juicio por jueces profesionales
- Garantía de imparcialidad: Los jurados, al estar compuestos por ciudadanos comunes, no forman parte del sistema judicial, lo que reduce riesgos de influencias políticas o corporativas en las decisiones.
- Participación ciudadana: Permite que la sociedad tenga un rol activo en la administración de justicia, fortaleciendo los valores democráticos y el vínculo entre la comunidad y el sistema judicial.
- Diversidad en la deliberación: Al estar integrado por personas con diferentes perspectivas, el jurado analiza los hechos de manera más amplia y diversa, evitando interpretaciones unilaterales.
- Legitimidad social: Los veredictos emitidos por un jurado tienen mayor aceptación en la comunidad, al provenir de un grupo representativo de la sociedad.
- Transparencia: El juicio por jurados elimina la opacidad percibida en algunos fallos judiciales, ya que las deliberaciones reflejan un debate abierto y colectivo entre ciudadanos.
Conclusión
El juicio por jurados representa un avance significativo hacia un sistema judicial más participativo y transparente. Aunque su implementación en Argentina aún enfrenta desafíos, su desarrollo es un paso clave para garantizar el cumplimiento de las garantías constitucionales y fortalecer la confianza en la justicia.